martes, 25 de diciembre de 2012

EL HOGAR DIVIDIDO


La playa por la noche, oscuro total

EL HOGAR DIVIDIDO

En cualquier matrimonio angustiado y despreocupado por la relación  siempre hay uno de los cónyuges que distancia y no se preocupa de la relación de ambos, pero el que realmente esta preocupado por la situación y  le invade el miedo por la situación que están pasando, es el que es consciente de lo que pasa, y por las consecuencias negativas de este proceder. Sin embargo el cónyuge que pasa de la relación  no se da cuenta de nada. Es ajeno a lo que esta pasando, tal vez debido a una falta de comunicación o de entendimiento el asunto es que para él todo va estupendamente y no tenemos ningún problema serio, simplemente los normales de cualquier matrimonio.

Normalmente la mujer que es la que necesita mas atención es la que se da cuenta que se esta perdiendo el cariño y la confianza entre los dos, pero el cónyuge indiferente vive ajeno a la tragedia que se avecina. Los conflictos siempre suelen ser culpa de los dos ya que los dos comparten responsabilidades en el hogar. Pero los conflictos en el hogar siempre altera las relaciones entre ambos y siempre uno de los dos esta preocupado por la situación, mientras que el otro parece ser que no tiene mayor interés por la relación  En consecuencia la relación se va deteriorando y todo este proceso alcanza a todos los miembros de la familia.

Cuando uno de los cónyuges esta decidido a dejar la relación  en la mayoría de las experiencias el llorarle y suplicarle que no se vaya no suele dar buen resultado y la contestación del indiferente en la mayoría de los casos es que ya no la quiere y que por lo tanto quiere recuperar su libertad. El humillarse sirve mas bien poco para retomar la relación  sino la empeora, y la decepción se suele apoderar del corazón del que a sido abandonado. Pero si él no muestra ningún interés por la relación, muy poco de puede hacer para la reconciliación  pues todos sabemos que es cosa de dos y si uno de los dos no quiere por mas que nos lamentemos y lloremos nos sentimos impotentes por no poder hacer nada por el fracaso obtenido.

Difícil solucionar el conflicto si una de las partes no tiene ningún interés en solucionarlo, poco importara la actitud que adoptamos en el hogar, por el contrario a pesar del dolor y del resentimiento, hay que actuar con moderación y con sentido común por mas difícil que sea, hay que reaccionar con cautela. No existe ningún enemigo y por lo tanto no tenemos que estar motivados por el odio. Reconocer que la situación ha cambiado y procurar tener buena relación como personas civilizadas, y no intentar librar alguna batalla con una perspectiva de victoria, pues este proceder no haría mas que empeorar futuros entendimientos.

Pero a pesar de todos los problemas hay que ser fuerte en la debilidad . Habra que afrontar la nueva situación  pero con serenidad y sin sentimientos de culpabilidad. Cuando ya se ha tomado la decisión de dividir el hogar muy poco queda por hacer, sino es, en intentar reconducir la relación para no causar daños mayores a la familia. Suplicarle al cónyuge indiferente no servirá  es como recibir una bofetada nosotros mismos y causarnos mas daño. Somos humanos con muchos defectos y habrá que tratar al causante del daño con bondad, aunque repudiemos su conducta por ser totalmente injusta hacia el cónyuge y la familia. Es obvio que no habrá que ceder a nuestros deseos venganza, estos sentimientos habrá que superarlos. Tendremos que luchar contra nuestras inclinaciones para superarlas, aunque nos encontremos desanimados por la situación  pues es posible que la lucha y los problemas continúen por mucho tiempo y habrá que responder con calma.

Los problemas de ruptura del hogar son problemas graves que tal vez la persona afectada se vea incapaz de salir hacia delante sola, pero bueno habrá que apoyarse en la familia en busca de consuelo y proteccion, es una situacion difícil y no sera fácil, pero habrá que aprender a sobrellevar los problemas y tirar hacia delante. Esto permitirá llevar una vida mas productiva, para poder enfrentarnos a las situaciones difíciles Nuestro presente y nuestro futuro dependerán de nuestros planes, y planificarlo para no encaminarnos al desastre emocional. La lucha y la ilusión son dos herramientas indispensables para salir hacia delante con confianza, y sin miedo por el futuro. Por mas doloroso que haya sido el fracaso en la pareja, habrá que aceptar la nueva situación y pensar que hay mas vida después de una separación matrimonial e intentar rehacer y organizar nuestra vida, dándole un nueva dimensión y oportunidad

ENRIC
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